Todos hemos estado allí. Tienes un secreto que ya no puedes guardar y necesitas contárselo a alguien. Pero, ¿y si decírselo a esa persona pudiera meterte en problemas? Ahí es donde entra en juego el privilegio abogado-cliente. Esta protección legal ayuda a mantener confidenciales las comunicaciones entre los abogados y sus clientes. Sin embargo, hay límites a lo que puedes ocultar. En esta publicación de blog, analizaremos las limitaciones del privilegio abogado-cliente y cómo afecta los casos penales.
Es importante decirle a tu abogado la verdad y revelar hechos importantes que pueden afectar tu caso. Esto es especialmente cierto en los casos de defensa crimina. Si ocultas información a tu abogado, puedes poner en peligro tu caso. Tu abogado necesita saber todos los detalles para poder brindarte la mejor defensa posible. Por ejemplo, en Rohan Law, tuvimos un caso en el que un cliente había sido acusado de DUI y preparamos una defensa en base a nuestro entendimiento de que era la primera vez por un cargo como este. Pero cuando llegó la fecha de la corte, nos enteramos de que los cargos de DUI no eran los primeros y que nuestro cliente no nos había informado sobre todos sus cargos penales anteriores. Esto arrojó nuestra estrategia de defensa por la ventana.
Ser honesto con tu abogado nos ayudará a crear una mejor estrategia legal para tu defensa. Existen leyes para protegerte de las consecuencias negativas de compartir tus secretos con tu abogado. De hecho, hay algunas cosas que puedes confesarle a tu abogado sin preocupaciones. Por ejemplo, si has cometido un delito en el pasado y se lo cuentas a tu abogado, no se puede obligar a tu abogado a testificar en tu contra en el tribunal. Esto se debe al privilegio abogado-cliente. El privilegio abogado-cliente es una protección legal que mantiene confidenciales las comunicaciones entre los abogados y sus clientes. Esto significa que puedes decirle a tu abogado casi cualquier cosa sin preocuparte de que se use en tu contra en la corte.
Sin embargo, existen algunos límites para el privilegio abogado-cliente que están diseñados para proteger a otros y desalentar las conspiraciones entre los clientes y sus abogados. Por ejemplo, si planeas cometer un delito en el futuro, tu abogado no puede ayudarte a hacerlo. De hecho, si le cuentas a tu abogado acerca de tus planes, los estándares éticos le exigen que lo informe a las autoridades. Si se le pregunta, tu abogado no puede mentir en su nombre sin arriesgar su licencia de abogado. Además, si la vida de alguien está en peligro, es posible que tu abogado tenga que romper la confidencialidad para salvar la vida de esa persona.
Hay casos en los que un abogado puede querer mantener la confidencialidad de su cliente y aun así verse obligado a hablar. Hay una regla de excepción de crimen-fraude que puede anular los derechos de privilegio de abogado-cliente. Esta regla establece que si se está cometiendo o planificando un delito, el abogado debe revelar lo que sabe a las autoridades, incluso si viola la confidencialidad. El no hacerlo convierte al abogado en parte del delito y lo somete a las mismas sanciones penales que el acusado.